Cuando un cliente va a pagarte unos gastos (vuelos, hospedaje, bienes para el desarrollo de la actividad...) hay que distinguir dos situaciones:
- Gastos reembolsables
Siempre va a nombre del autónomo y se incluye en la contabilidad tanto como gasto o ingreso para que el resultado sea 0.
Por ejemplo, un vuelo para ir a prestar servicio al cliente. Se adquiere el vuelo (50€ + IVA), contabilizamos el gasto al emitir la factura al cliente, donde se incluye tanto IVA como IRPF (si aplica).
¿Cómo se debe contabilizar?
- Si la factura de compra está a nombre de tu cliente
- Incluye las filas necesarias como gastos cubiertos
- No subas la factura de compra porque no está a tu nombre
- Si la factura de compra está a tu nombre
- Debe incluirlos en su factura emitida pero la categoría tiene que ser un "servicio profesional”
- Tienes que añadir los gastos en tu contabilidad.
Ejemplo:
- Gastos suplidos
Es un "gasto" que un autónomo paga previamente, pero al solicitar la factura, lo hace a nombre de su cliente. Para recuperar ese dinero, incluye ese gasto en la factura emitida.
Por tanto, no tiene efectos para el autónomo en su contabilidad, aunque sí hay obligación de incluirlo en las facturas emitidas sin IVA ni IRPF.
Ejemplo:
Por lo tanto, siempre hay que diferenciar a nombre de quién va a ir la factura ya que esto determinará como se incluirá en tu factura emitida.